Se acerca la época del destape, poco a poco comenzaremos a utilizar prendas de ropa que dejan visibles zonas de nuestro cuerpo y por este motivo es buen momento para adornarse el cuerpo con tatuajes.

¿Sabes los consejos que puedes dar a los pacientes que acuden a por cremas de cuidado para tatuajes?

 

Que es un tatuaje y que riesgos supone para la piel.

Los tatuajes se realizan mediante un procedimiento que produce incisiones sobre la piel, alterando su función de barrera y dando lugar a efectos no deseados. Las posibles complicaciones incluyen infecciones locales y sistémicas (VIH y hepatitis), dermatitis de contacto o reacciones a cuerpo extraño, entre otras, que se relacionan tanto con la técnica y los materiales utilizados, como con las características particulares de la zona del cuerpo sobre la que se actúa.

Infecciones:

La realización de un tatuaje implica la punción de la piel en múltiples ocasiones para inyectar la tinta en la dermis. En este proceso puede producirse la entrada de microorganismos y dar lugar a la infección de la piel tatuada:

  • Infecciones bacterianas producidas por  aureus, estreptococos del grupo A y Pseudomonas, que requieren tratamiento de la zona con un antibiótico tópico. Los signos que ayudan al diagnóstico de la infección local son la aparición de signos inflamatorios locales, como eritema, edema y dolor que surgen alrededor del lugar de punción.
  • Si la infección prospera puede afectar a todo el espesor de la piel hasta el tejido celular subcutáneo, produciéndose una celulitis.
  • El uso de agujas no esterilizadas o contaminadas con sangre infectada puede implicar la transmisión de enfermedades sistémicas graves como la infección por VIH, VHC o VHB.

Todos estos riesgos es lo que hacen importante la elección del centro donde el paciente se va a tatuar, que esté acreditado y utilice tintas homologadas y material desechable.

Reacciones alérgicas:

La introducción de tintas dentro de la piel puede producir reacciones alérgicas frente a los colorantes que componen la tinta. En estos casos se observa una reacción inflamatoria en determinadas áreas del tatuaje, que puede verse más sobreelevada y eritematosa. En ocasiones, si la reacción inflamatoria es muy intensa, puede producirse un tejido cicatricial en la zona del tatuaje y su decoloración.

Queloides:

Los queloides son cicatrices anormales que aparecen en algunos individuos debido a que el proceso de cicatrización se produce de forma exagerada. El tratamiento de los queloides no siempre tiene buen resultado, por lo que debe desaconsejarse el uso de estas prácticas en individuos que ya hayan experimentado aparición de queloides o cicatrices hipertróficas sobre cicatrices anteriores.

 

CONSEJO FARMACÉUTICO:

Dicho todo lo anterior, lo principal en el cuidado de un tatuaje es evitar infecciones y ayudar a cicatrizarlo. Normalmente el paciente acudirá a la farmacia con un vendaje realizado por el mismo profesional que le tatuó casi siempre con film de plástico u otro apósito oclusivo.

Las recomendaciones se deben realizar durante al menos 15 días.

  • Mantener el film/apósito oclusivo durante 24 h
  • Pasadas las 24 h lavar el tatuaje 3 veces al día con un jabón suave y/o antiséptico.
  • Tras el lavado aplicar crema hidratante protectora y regeneradora de la piel.
  • No exponer al sol y pasados los 15 días utilizar un fotoprotector SPF 50+ específico para piel sensible al menos en la zona localizada.
  • Evitar baños prolongados.
  • Utilizar prendas de ropa ligeras y de algodón que no rocen la zona del tatuaje.
  • Durante los primeros días: no realizar ejercicio físico, evitar baño en piscinas y en el mar.
  • Pasados 15 días, o cuando el proceso de cicatrización haya finalizado es recomendable seguir aportando hidratación a la zona para reestablecer la barrera cutánea.
  • Si el paciente observa alguna evolución de la cicatriz fuera de lo común así como exudado, inflamación o enrojecimiento en la zona del tatuaje, deberá acudir al médico.

¿Qué recomendaciones dais en tu farmacia para el cuidado de los tatuajes?

 

 

FUENTES:

http://www.elsevier.es/es-revista-farmacia-profesional-3-articulo-piercings-tatuajes-13137550

 

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